ACTIVIDADES QUE ALTERAN EL MEDIO AMBIENTE
La sobre población es una de las problemáticas más preocupantes que se ha generado durante las últimas décadas, ya que provoca un empeoramiento gradual de la calidad de vida de todos los habitantes del planeta, generando conflictos sobre todo entre la población humana y, evidentemente, afectando el medio ambiente.
AGOTAMIENTO DE LOS RECURSOS NATURALES
El principal efecto de la sobre población es el consumo desigual y desmedido de recursos. El planeta tiene una capacidad limitada su generación y cada año el consumo de estos recursos se ha elevado a un ritmo más rápido del que el planeta es capaz de renovarlos. Como consecuencia, se presenta desabastecimiento, hambrunas, conflictos territoriales.
SOBRE EXPLOTACIÓN DE RÍOS, LAGOS Y MANTOS ACUÍFEROS
La población humana crece progresivamente, por lo tanto cada vez es mayor la demanda de alimentos y recursos, lo cual provoca grandes alteraciones en el ambiente, situaciones como la pesca descontrolada puede llevar a la desaparición de especies animales y vegetales, causando equilibrio de los ecosistemas y posteriormente su destrucción. Esta demanda, cada vez más elevada, de recursos también ha generado la pérdida de grandes reservas de aguas subterráneas, lo cual desencadena una gran escasez de agua y, esto a su vez causa la pérdida de grandes porciones de tierra de labranza.
DE-FORESTACIÓN
La tala indiscriminada de árboles ha generado la desaparición de bosques enteros, lo cual es bastante preocupante, ya que los árboles son un componente indispensable para la conservación del medio ambiente y el planeta en general. El crecimiento poblacional tiene una influencia directa sobre esta gran problemática, a medida que el número de habitantes aumenta, también lo hace la demanda inmobiliaria, por lo que cada vez se destruyen grandes áreas de bosques para la construcción de viviendas y la expansión de las industrias. Y debido a todo este proceso , vamos viendo cambios en el habitat , van desapareciendo especies y llegan a peligro de extincion.
USO DE COMBUSTIBLES FÓSILES
La quema de combustibles fósiles provoca una mayor emisión de dióxido de carbono, lo que provoca un exceso de temperatura o calentamiento global que tiene como consecuencia el conocido cambio climático. Esta combustión también libera gran cantidad de óxidos de azufre y nitrógeno que reaccionan con gases de la atmósfera, y precipitan en forma de ácidos (sulfúrico y nítrico) incrementando la acidificación de agua en general. Esta precipitación causa daños en la vegetación, acelera la contaminación de la tierra y del agua y corre a los edificios, las estructuras metálicas y los vehículos.
CONSUMO:
La tendencia al consumo se ha convertido en uno de los principales focos de la problemática ambiental en los últimos años. La producción y adquisición de bienes y servicios innecesarios que alimentan la cultura excesiva de tener, poseer y satisfacer necesidades no básicas tiene un impacto negativo en el ambiente, ya que, mientras más se produzca más recursos se utilizan y más contaminación se genera. También es importante tener en cuenta que el gasto excesivo de energía y materiales contribuyen en gran medida al cambio climático en el planeta.
AGRICULTURA:
La agricultura, asociada a la alta demanda de alimentos debido al crecimiento poblacional, tiene un gran impacto sobre el ambiente. Como se mencionó anteriormente, la adecuación de tierras para cultivar supone la tala de una gran cantidad de árboles. De igual manera, se consume de forma excesiva recursos como el agua, e incluso se realiza canalización y desvío de fuentes de agua, lo que genera la erosión del suelo a su paso. Además, el uso excesivo de fertilizantes y plaguicidas causan contaminación del aire, el suelo y de fuente de agua, afectando la biodiversidad dependiente de los recursos de la zona. También en muchas partes del planeta se ha venido implementando la practica conocida como el mono cultivo, que consiste en cultivar con una sola especie vegetal grandes extensiones de tierra, lo cual supone un empobrecimiento en la diversidad y, por consiguiente pérdida de hábitats y especies.